sábado, 14 de agosto de 2010


Para tener seguridad de que la PC operará de manera adecuada, obviamente usted deberá cuidarla. Dicho cuidado implicará evitar algunas acciones perjudiciales y realizar periódicamente ciertas medidas simples de mantenimiento. Estas medidas ayudarán a minimizar el desgaste del equipo y prevenir fallas mayores, causadas por la acumulación de suciedad en varios componentes.

ERRORES DEBIDOS A LA SUCIEDAD DEL EQUIPO

Posiblemente, usted ya se habrá encontrado con el problema que suele surgir después de cierto tiempo de uso. Dicho problema consiste en que algunos discos que anteriormente funcionaban a la perfección, ya no se leen correctamente. Los síntomas del problema están causados por la acumulación de suciedad, en este caso, en los cabezales de escritura/lectura de la unidad. Y aclaremos que tal falla ocurre más a menudo con los equipos que están expuestos al humo de tabaco.

A continuación, describiremos aquellas falencias ocasionadas por el polvillo, el humo, el cambio de temperatura, los campos magnéticos y la humedad. Sin embargo, no todos los componentes del equipo resultan afectados en la misma medida por los distintos factores. Por ejemplo, sabemos que el teclado y el mouse están expuestos a mayores exigencias físicas e influencias externas que el disco duro.

Los dos enemigos principales de la PC: el polvillo y la nicotina

Si una PC se coloca -sin que se la utilice- en un rincón de una habitación, su superficie se cubrirá de una capa de polvo, si no se limpia con regularidad. El interior del equipo no utilizado, en cambio, quedará relativamente libre de polvo, ya que no muchas partículas podrán entrar a la CPU, a través de sus entradas y salidas de aire.

Sin embargo, el interior de un equipo que se utilice durante varias horas diarias, pronto estará completamente cubierto de polvo. La unidad del ventilador en el suministro eléctrico extrae aire caliente desde el interior de la CPU. Como resultado, el aire fresco ingresa dentro del gabinete a través de sus aberturas, y arrastra consigo todo tipo de partículas, en especial la nicotina.

Asimismo, y ya que las unidades flexibles (disqueteras o lectoras) no son unidades cerradas, el aire y la suciedad también entrarán a través de sus aberturas. Las partículas se depositan entonces en los cabezales de lectura/escritura de la unidad, donde eventualmente, estas sustancias podrán afectar la buena operación del dispositivo.

¡Peligro por humedad!

La humedad puede producir, también, una capa que se deposita dentro de su CPU sobre la suciedad y

formar una capa de aislamiento. Esto provoca la acumulación de calor en los componentes de la CPU. Y las temperaturas excesivas durante la operación, pueden reducir la duración de los componentes electrónicos, o incluso destruirlos.

¡Peligro por calor!

Los cambios bruscos de temperatura nunca serán buenos para su CPU. La temperatura ideal resultará aquella que oscile entre los 18°/23° C. Un calor excesivo, puede destruir fácilmente los componentes electrónicos, los chips del procesador y los del coprocesador.

Por otra parte, nunca intente secar los componentes mojados con un secador de pelo. Aunque este método acabará por secar el hardware, es posible que también destruya los componentes, ya que los calentará demasiado. Lo correcto será desmontar los componentes individuales de la CPU, luego frotarlos suavemente con un paño sin hilos, y dejarlos secar al aire durante varios días.

Asimismo, nunca encienda en forma inmediata un equipo que haya sido expuesto a bajas temperaturas y luego trasladado a una sala con calefacción. En este caso deberá esperar, por lo menos, treinta minutos-y preferiblemente un tiempo mayor- para permitir que se evapore cualquier condensación de humedad en el equipo, y que los componentes adquieran la temperatura del entorno. Recuérdelo: esto se logra esperando el tiempo recomendado (30").

Daños por corrosión

Luego de largos períodos, el nivel excesivo de humedad causará la corrosión en las superficies de metal. Es muy extraño encontrar contactos de cables con corrosión en los equipos informáticos, ya que esto suele ocurrir, únicamente, en lugares donde hay muchísima humedad.

La corrosión causa síntomas de errores que son muy difíciles de diagnosticar. Normalmente estos síntomas serán intermitentes (a veces el equipo funcionará y otras veces, no).

De vez en cuando, revise las conexiones de los cables del sistema para comprobar si existe alguna corrosión.

Interferencias magnéticas de los imanes

Su CPU y sus periféricos serán susceptibles a la interferencia, por la acción de fuertes campos magnéticos, producidos, tal vez, por otros aparatos electrónicos. La protección insuficiente de suministros eléctricos, por ejemplo, puede originar estos campos magnéticos, y hacer que la imagen del monitor se vuelva borrosa. Ello suele ocurrir cuando una impresora láser está colocada demasiado cerca del monitor. Cables de la impresora que estén mal protegidos y en contacto cercano con los cables del suministro eléctrico, podrán producir, también, errores en la salida de la impresora.

De la misma manera, estos campos magnéticos podrán destruir la información guardada en los soportes

de datos. Por lo tanto, no coloque sus disquetes sobre cualquier fuente de campo magnético -como la fuente de alimentación de la CPU- ni siquiera durante cortos períodos de tiempo.

Incluso los destornilladores con punta magnética -que a no dudarlo resultan muy prácticos- son capaces de destruir los discos rígidos. En consecuencia, guarde siempre estas herramientas en lugares distantes, que estén fuera de estas interferencias magnéticas.

MANTENIMIENTO PREVENTIVO Y CUIDADOS

Sin embargo, y a pesar de las advertencias que consignamos, puede decirse que las computadoras son equipos que casi no necesitan mantenimiento. Sólo deberá tener en cuenta algunas sencillas medidas de mantenimiento y cuidado que usted mismo podrá realizar. Simplemente, acostúmbrese a realizar una limpieza exhaustiva dos veces por año, aproximadamente.

La manera más adecuada y conducente de limpiar el interior de su CPU, consiste en el uso de un pincel de cerda fino. Limpie bien los integrados con este pincel. Para llegar a los sitios de difícil alcance, podrá utilizar una lata de aire comprimido con un tubo largo de boquilla. Esto facilitará la eliminación del polvo, en cualquier sitio del sistema.

Nunca frote los componentes con un paño húmedo. Utilice solamente los métodos secos para eliminar el polvo de su CPU.

Además, limpie el exterior de la fuente de alimentación del sistema. Los agujeros en la carcaza de la fuente de alimentación son espacios que permiten acumular en ella una gran cantidad de polvo y nicotina. Por otra parte, si estos agujeros se bloquearan, la ventilación del sistema no funcionaría bien, provocando acumulación de calor, hasta que, finalmente, dañaría el hardware.

Mantenimiento de las unidades de disquete y lectoras

Así como todos los dispositivos de la CPU, las unidades de disquete y lectoras, dependen de piezas mecánicas movibles, éstas son susceptibles a desgastarse. Empero, su mantenimiento regular y adecuado podrá aumentar considerablemente su duración. Para lograrlo retire la unidad y utilice aire comprimido para quitar todos los depósitos de polvo de su interior. No es aconsejable desmantelar por completo estos dispositivos, dado que la ubicación de cada pieza está sincronizada con otra, y si no volviesen a ser colocadas correctamente, el dispositivo quedaría inutilizado. Antes de reinstalar las unidades, utilice un algodón humedecido con alcohol de quemar, para limpiar suavemente los cabezales de lectura/escritura.

Asimismo, tenga cuidado en no torcer o distorsionar cualquier componente, y sobre todo, no abra la casilla

de la unidad bajo ninguna circunstancia. Siempre deberá guardar sus discos en los envoltorios correspondientes, para protegerlos del polvo. Además, procure mantener limpia el área alrededor de la unidad, cuestión que los cabezales no se ensucien demasiado pronto.

Los discos rígidos no necesitan mantenimiento

Los discos duros son dispositivos totalmente libres de mantenimiento. Están cerrados herméticamente, para que la contaminación -como por ejemplo, el polvo o la nicotina- no pueda entrar en el disco duro. Por su parte, se minimizará la posibilidad de dañar las superficies del disco duro, evitando movimientos bruscos o choques de la CPU, tanto cuando el equipo esté trabajando como cuando se encontrare apagado. Cuando tuviere que mover el equipo, asegúrese de que los cabezales del disco duro estén alineados. Para realizar esto, usted deberá utilizar un programa especial. El programa colocará los cabezales de lectura/escritura de las unidades en una postura tal, que evitará el contacto con la superficie del disco, también conocida como landing zone. Estos programas suelen denominarse PARK.COM, SHIPDISK.EXE, etc. Los fabricantes de equipos de marcas reconocidas, suelen incluir, en sus discos de diagnóstico, un programa de utilidad de alineamiento del disco rígido. Los discos rígidos más nuevos (por ejemplo el bus AT), ni siquiera necesitan ser alineados. Estos tipos de discos colocan sus cabezales automáticamente, en cuanto se apaga el sistema -auto-head-lift (levantamiento automático de cabezales)-.

Otra manera de prevenir el desgaste prematuro de los discos rígidos, consiste en utilizar un programa caché que optimizará el acceso al disco. El controlador de SMARTDRV.EXE es un programa incluido en el sistema operativo de MS-DOS. Este controlador reducirá considerablemente el número de operaciones necesarias del disco y por lo tanto, prolongará la vida útil del mismo.

Mantenimiento y limpieza del teclado y del mouse

Un teclado que se utilice con mucha frecuencia estará expuesto a un alto nivel de tensión mecánica. Además, todo tipo de suciedad también caerá dentro del teclado. Para evitar que las teclas se bloqueen, así como para impedir otras deficiencias, el teclado deberá ser limpiado regularmente.

Una de las maneras de limpiar un teclado es ponerlo en posición boca abajo, y agitarlo fuertemente sin golpearlo. Una manera más adecuada será la de utilizar aire comprimido para soplar los espacios entre las teclas individuales. La manera más eficaz de limpiar a fondo el interior del teclado, consistirá en abrir el encaje del teclado y utilizar un pincel para limpiar a fondo el interior. Se podrá limpiar la carcaza y las teclas, con un paño hu-

medecido con agua y un detergente muy suave. Algunos usuarios también encuentran en los artículos de limpieza doméstica -por ejemplo, el líquido para limpiar cristales, que contiene amoníaco- efectivos recursos para limpiar los teclados. Recuerde que si algún líquido penetrara en el teclado, usted deberá asegurarse que esté completamente seco antes de volver a utilizarlo.

Otro dispositivo, componente habitual de un equipo, es el mouse. Los mouses más comunes son los que utilizan recursos mecánicos para transformar el movimiento del mouse en señales electrónicas. Esto se produce a través de una esfera rotativa que establece contacto con la superficie de la mesa. Mientras el mouse se mueve por la superficie, va recogiendo la suciedad que encuentra sobre ella y que luego deposita en su interior. Finalmente, la acumulación de esta suciedad afectará el rendimiento del mouse. Para minimizar este problema, asegúrese de que la superficie por donde desplace el mouse esté limpia. La utilización continua del pad puede ayudarlo mucho.

El cable del mouse también puede provocar daños en el mismo. Por ello, se recomienda controlar la conexión y el recorrido del cable. Si éste se encontrare muy tirante o al moverlo nota que se estira, correrá el riesgo de que se corte en su parte interior, provocando así que la señal que envía a la CPU no se interprete correctamente, o termine dañando el puerto de comunicación (COM 1).

¿Cómo se limpia un mouse?

Para realizar una correcta limpieza de un mouse, tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:

• En la parte inferior de su mouse encontrará un disco que se puede girar, para liberar la esfera rotativa de su eje. Límpiela regularmente, utilizando un paño humedecido. Puede utilizar algodón y alcohol.

• Dentro del mouse encontrará tres pequeñas ruedas. Estas, normalmente, acumulan la suciedad que recogió el mouse al recorrer la superficie por donde lo ha desplazado. Para eliminarla, utilice un escarbadientes. Y una vez que haya terminado, coloque las piezas en su lugar y controle su funcionamiento.

El mantenimiento del monitor

En el mantenimiento periódico de la computadora, se deberá incluir, también, la limpieza del monitor. Cuando inicie su limpieza, asegúrese de que su monitor esté apagado. Utilice sencillamente un producto doméstico -limpiador de cristales- para limpiar la pantalla y la carcasa del monitor. Acostúmbrese a volcar el producto sobre un paño y no lo haga directamente sobre el monitor para evitar que el líquido entre en las aperturas o ranuras.

¡No abra nunca el monitor!

No abra nunca, bajo ningún concepto, la carcaza del monitor. El interior de la carcaza contiene un suministro eléctrico de alto voltaje, que almacena energía suficiente capaz de causarle serios daños, e incluso, la muerte. Si usted cree que su monitor necesita mantenimiento, llévelo al personal especializado.


MANTENIMIENTO DEL SOFTWARE

Además de la CPU y sus componentes (hardware), el software también requerirá mantenimiento regularmente. El mantenimiento de los datos deberá convertirse en una tarea de rutina. Periódicamente, compruebe el contenido del disco rígido, y determine cuáles son los archivos que todavía son necesarios y cuáles se pueden eliminar. La eliminación de archivos no sólo creará más espacio en el disco, sino que también facilitará la organización de los archivos.

Muchos programas, como Microsoft Word, crean automáticamente copias de seguridad de sus archivos de datos, normalmente con la extensión.bak. Pero, aunque ello resulta práctico, ocupa mucho espacio en el disco. Además, cuando navegue por Internet, también se crearán archivos temporales (reconocible por una extensión tmp) que podrán ser periódicamente eliminados.

Protección contra los virus. Observe el tamaño de los archivos.

Un apartado especial merece el problema de los virus y la protección contra los mismos. Debido al incremento del número de usuarios que comparten soportes de datos, la universalización de las redes, y muy especialmente, el explosivo incremento de los sistemas de correo electrónico, han permitido que los virus se convirtieran en un problema muy serio para la mayoría de los usuarios.

Como probablemente usted ya sabe, muchos virus no actúan en forma inmediata, después de haber infectado a un programa. Por el contrario, permanecen en estado latente durante un cierto tiempo. Luego, será posible que se convierta en residente en la memoria. Y cuando el programa portador sea activado, entonces también infectará los programas que se ejecuten a posteriori. Por lo que puede apreciarse, el virus se activará solamente después de un tiempo, a través de una combinación de factores predeterminados, tales como la fecha (el virus de Michelangelo) o, por ejemplo, la décima vez que se arranque el programa portador. El resultado de los virus varia desde algo que resulta gracioso, hasta convertirse en un elemento realmente destructivo. El abanico de posibilidades va desde la descomposición de la imagen de pantalla con una lluvia de letras, hasta la destrucción irreversible de todo el contenido del disco rígido.

Y puesto que los virus no son otra cosa que pequeños programas inteligentes, ocupan espacio en el disco donde residen. Por lo tanto, cuando un virus se introduzca en un archivo de programa, el tamaño del archivo se incrementará. El aumento inexplicable de un archivo siempre indica la presencia de un posible virus. En consecuencia, si usted no comprueba los tamaños de los archivos periódicamente, los virus no serán detectados. Sin embargo, no solamente se podrán infectar los archivos de programas, sino también podrá hacerlo cualquier tipo de archivo. El mismo método será empleado respecto de los disquetes.

Programas antivirus

Actualmente, existe una gran variedad de virus, a la vez que se crean y aparecen, diariamente, nuevos. Lo mismo ocurre con los antivirus. La efectividad de los antivirus dependerá de que estén al corriente de los virus nuevos. Por lo tanto, es recomendable que usted instale solamente programas antivirus, provenientes de aquellos fabricantes que actualizan sus productos periódicamente. Por ello, será conveniente, sobre todo cuando usted esté buscando este tipo de software, que se asegure y compruebe que dichos fabricantes actualicen sus productos antivirus, cuando esté buscando este tipo de software.

Hace algún tiempo, el software antivirus fue objeto de críticas, ya que, aunque era capaz de detectar los virus, no los podía eliminar siempre, con total seguridad. Sin embargo, esta crítica ya no tiene vigencia. Ciertamente la mayoría de los programas antivirus desarrollados profesionalmente destruyen completamente al virus y, lo más importante, no perjudican el contenido del archivo portador. Estos programas suelen ser fáciles de usar y muchos soportan el uso del mouse.

Como puede inferirse, aunque no existen métodos totalmente seguros de protección contra los virus, usted puede reducir al mínimo, la posibilidad de que su equipo sea infectado.